¿Plagio, homenaje o un gesto de audacia diplomática? Tal vez hayan sido las tres cosas juntas: Javier Milei usó en su primer discurso ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) una frase que parece extraída casi textual del guion de la mítica serie The West Wing, que fue furor entre 1999 y 2006.